26 jul 2020

Geometría urbana: los polígonos regulares como fundamento configurador de plazas.



Grammichele es una ciudad siciliana en la que la geometría urbana es omnipresente.
En este artículo vamos a adentrarnos en la geometría urbana, aproximándonos a ella de manera fragmentaria por cuatro razones. La primera es que nos limitaremos a examinar un tipo de espacio urbano muy concreto: las plazas. La segunda es que adoptaremos un punto de vista exclusivamente bidimensional, fijándonos en el plano del suelo. La tercera es que solo prestaremos atención a un aspecto de esas plazas: su delimitación. Finalmente, la cuarta y última razón, es geométrica, ya que atenderemos únicamente a los polígonos regulares como fundamentos configuradores de las mismas.
Convocaremos así a triángulos equiláteros, cuadrados, pentágonos, hexágonos y demás figuras planas perfectas de lados y ángulos iguales. Se compone así un embrionario catálogo de plazas poligonales regulares a lo largo de todo el mundo.

4 jul 2020

Vivir una casa de Wright: de las “casas de la pradera” a las “casas usonianas” (pasando por la “casa de la cascada”)


Las casas de la pradera iniciaron las investigaciones sobre la vivienda unifamiliar de Wright y las casas usonianas las concluyeron. Ambos conjuntos muestran similitudes y diferencias importantes. Arriba, la Robie House, considerada la cumbre de las Prairie Houses. Debajo, la Winckler Goetsch House, una de las más destacables casas usonianas.
Frank Lloyd Wright es uno de los pilares fundamentales del Movimiento Moderno. Tuvo una larga vida y una dilatada carrera profesional dotada de una creatividad extraordinaria. Fue un “tradicionalista revolucionario” genial que, además, supo crear escuela.
Realizó una obra muy numerosa y variada, aunque la arquitectura residencial unifamiliar fue uno de sus ámbitos preferidos. En ese tipo de viviendas buscó crear un estilo “genuinamente americano” que tuviera una relación intensa con la naturaleza exterior a través de una nueva configuración espacial y de un lenguaje formal de gran simplicidad aparente, todo ello sin perder la funcionalidad y el confort. Las “casas de la pradera” de sus comienzos en Chicago se convirtieron una de las más poderosas imágenes visuales de la arquitectura norteamericana. Sus posteriores y extrañas residencias californianas (etiquetadas por él como “casas de bloque textil”), darían paso a la excepción más singular de su producción: la “casa de la cascada”, su obra más famosa y quizá la vivienda más conocida de la arquitectura moderna para el público no especializado. En su última etapa, cercano a cumplir los setenta años, iniciaría una revisión de los planteamientos de las Prairie Houses para ofrecer viviendas asequibles y de calidad al americano medio: las “casas usonianas”.