¿Qué fue el Fórum 2004 de Barcelona? Muchas
personas se hicieron esa pregunta entonces y todavía hoy, años después, la
respuesta es vaga.
El Fórum Universal de las Culturas es un evento trienal que comenzó en
aquel 2004, en Barcelona, y ha seguido celebrándose desde entonces (Monterrey,
2007; Valparaíso, 2010 y está previsto para Nápoles en 2013). Es un
acontecimiento, de carácter ciudadano, que pretende fomentar el diálogo, el
intercambio de ideas y la concienciación para avanzar en temas como la
sostenibilidad, la paz y la convivencia entre las diversas culturas, dentro del
marco de la globalización.
Como todo gran evento de esas
características, estuvo rodeado de polémicas, y más en aquel 2004 inaugural. Pero
si existen dudas acerca del Fórum en
sí y de sus resultados, de lo que no cabe ninguna es sobre la repercusión que
tuvo en la transformación de la ciudad. A pesar de su carácter temporal, logró actuar
como un catalizador urbano, permitiendo a Barcelona, nuevamente, encontrar un estandarte tras el cual conducir
una nueva operación urbanística de gran trascendencia.
Esta vez el objetivo era regenerar una zona, que había sido muy maltratada
anteriormente, para convertirla en un Área de Nueva Centralidad metropolitana que,
además, permitiría rematar la Avenida Diagonal y culminar la apertura de la
ciudad al mar.
Barcelona conoce bien el valor de
los grandes eventos como catalizadores urbanos. Estos acontecimientos, por su
dimensión y trascendencia, son capaces de aunar voluntades, superar diferencias
y generar consensos capaces de implementar proyectos que, sin ese apoyo, serían
imposibles. Las operaciones urbanas vinculadas a eventos tan significativos
como las Exposiciones Universales o los JuegosOlímpicos de 1992 dan testimonio de ello. Barcelona siempre ha mostrado
la inteligencia de saber aprovechar ese impulso para acometer operaciones de
gran calado para la ciudad.
Tras los Juegos de 1992, Barcelona experimentó
un significativo incremento en la actividad turística, en las pernoctaciones
hoteleras, o en la celebración de ferias y congresos. Estas circunstancias
evidenciaban la necesidad de incrementar
la oferta de estos servicios y se comenzó a buscar una solución para ello.
En paralelo a esa búsqueda,
Barcelona se enfrentaba (y enfrenta) a unas circunstancias comunes a muchas de
las ciudades contemporáneas, la deslocalización industrial. El traslado hacia
periferias metropolitanas de industrias, antes centrales, genera suelos
inactivos que conllevan consecuencias negativas. Barcelona, para evitarlas, puso
en marcha su proyecto 22@ Barcelona en el Poble Nou para
fomentar nuevas actividades económicas en esa parte de la ciudad.
Estas circunstancias enmarcan la
operación urbana asociada al Fórum de las
Culturas 2004. Se buscaba potenciar el programa 22@ Barcelona, de forma que, además, permitiera suplir las necesidades
dotacionales comentadas. Había un lugar que reunía las condiciones necesarias
para ese gran programa de equipamientos, pero que contaba con muchos problemas
urbanos y sociales: el Área
Diagonal-Besós. Era un reto difícil pero permitiría conseguir un doble
objetivo: proporcionar un centro de
recursos para 22@ Barcelona y recualificar
un espacio urbano altamente degradado.
El Fórum de las Culturas 2004 se celebró y la interpretación de sus
resultados fue dispar. Se debatió entre los que consideraron un éxito la
convocatoria, por el nivel de los actos, de los participantes y la participación
ciudadana, y quienes vieron poco más que una exposición protagonizada por los
guerreros de Xian.
No obstante, el Área Diagonal-Besós
no fue construida para alojar el Fórum.
El Fórum era, solamente, una utilización
temporal (eso sí, la primera) de ese nuevo espacio que aspiraba a convertirse
en un nuevo centro de la ciudad.
El área de actuación
El entorno de la desembocadura del
Besós era un espacio muy degradado. Tanto ambientalmente como desde el punto de
vista social. Este territorio, fronterizo entre las administraciones de
Barcelona y Sant Adrià era un lugar “olvidado” en las dinámicas urbanas.
A ello habían contribuido hechos
como la interrupción de la Avenida Diagonal que lo había “desconectado” del
resto de la ciudad; la proliferación de industrias que se estaban marchando
dejando solares inactivos; la existencia de barrios, como La Mina, muy marcados
por la marginalidad social, o la presencia del rio Besós que se había transformado
en algo parecido a una cloaca a cielo abierto.
En parte por esto (y también por la
facilidad de suministros y evacuaciones), se concentraban allí algunas de las
grandes infraestructuras metropolitanas que más contaminaban (como una
depuradora, una incineradora o las centrales eléctricas). En este sentido el
área Diagonal-Besós era algo similar a los “cuartos trasteros” de las
viviendas, espacios funcionales, muy útiles, pero que se ocultan y no se
enseñan a nadie. Pero la construcción de la Ronda Litoral volvió a colocarlo en
la escena al otorgarle una gran visibilidad. Porque a pesar de su toda su
problemática, esa zona era un lugar con un enorme potencial.
Por ello, y dentro de una
estrategia mayor, que incluía la Plaza de Glorias (que debía asumir el papel
central que Cerdá pensó para ella), la Sagrera y el Poble Nou (muy afectado por
la deslocalización industrial), el Área Diagonal-Besós, una las asignaturas
pendientes que tenía la Barcelona metropolitana, emergió como un nuevo reto posolímpico.
Y el Fórum 2004 fue su catalizador.
Poco después de los Juegos
Olímpicos, en 1994, se constituyó la Agencia
Metropolitana Barcelona Regional, que en 1996 presentó un análisis y una propuesta
para la reconversión de la zona que se denominó Diagonal-Besós (trabajo que fue
galardonado con el Premio Europeo de Urbanismo 1997-98). Josep Acebillo,
arquitecto que, desde el Ayuntamiento, ya había tenido un papel destacado en la
planificación de las operaciones olímpicas, fue su director y sintetizó en
cinco ideas las tesis programáticas de la operación:
Permanencia de las infraestructuras existentes.
El traslado de las grandes
infraestructuras metropolitanas existentes en esa zona se mostró inviable. Se
decidió mantenerlas introduciendo en ellas mejoras técnicas que paliaran sus
efectos contaminantes y utilizar el diseño urbano como estrategia para integrarlas
en un espacio multicapa que aspiraría a convertirse en un ejemplo de la
complejidad de la ciudad posindustrial contemporánea.
Generación de un nuevo tipo de espacio urbano.
La reconversión tecnológica de las
infraestructuras no resultaba suficiente
para recuperar esa zona para la ciudad. Era necesario proponer un nuevo
espacio atractivo, capaz de superar las contradicciones internas de partida.
Los intersticios dejados por las
infraestructuras, aunque eran espacios potencialmente valiosos eran escasos
para alojar el programa urbano que se deseaba implantar. Por eso se ganó terreno al mar, definiendo una
nueva línea de costa. Se plantearon tres “penínsulas” de nueva creación, una al
sur del canal de la riera de Horta (calle Prim) y otras dos entre esta riera y
el rio Besós. Entre estas dos “penínsulas”
se ubicaría el puerto deportivo (que era una de las condiciones exigidas al
programa por el Ayuntamiento de Sant Adrià).
Entre los criterios que definirían
el nuevo espacio estaba el proporcionar un adecuado tratamiento al final de la
Avenida Diagonal y solucionar el final del litoral marítimo que se había comenzado
a abrir a la ciudadanía años atrás.
Conversión del nuevo territorio en un emblema de 22@ Barcelona.
La operación de 22@ Barcelona, que sigue activa, busca
reconvertir un territorio muy afectado por la deslocalización industrial en un
nuevo espacio productivo, adecuado para las nuevas actividades económicas y con
una fuerte implantación tecnológica. Complementariamente, y dentro de la
filosofía de la mezcla de usos, también se planteaban 40.000 viviendas y muchos
nuevos equipamientos que irían completando el territorio.
El proyecto del Fórum 2004 podía ser una gran
oportunidad, en relación a este gran proyecto de reconversión. Se convertiría
en su gran centro de recursos, alojando los más grandes equipamientos que eran
necesarios para el nuevo distrito tecnológico. Desde un nuevo Campus Universitario
con centros educacionales y de investigación; o el gran Centro de Convenciones
y Congresos; e incluso el nuevo Zoo que permitiría liberar espacio en el Parque
de la Ciudadela y, gracias a ello, posibilitaría una mejor conexión entre Poble
Nou y el centro histórico de la ciudad.
Creación de un área de nueva centralidad metropolitana.
El territorio seleccionado ya había
planteado algún problema de articulación al propio Cerdá, cuando trazó el Eixample
y propuso en esa zona una plaza que recogiera los complejos flujos que ya se
adivinaban. No obstante la indefinición del Eixample
a partir de la Plaza de Glorias, en la que incluso la Avenida Diagonal había
desaparecido, dejó este lugar en el olvido y presa de la marginación.
El proyecto del Fórum buscaba reconectar este territorio
con la ciudad. La prolongación de la Diagonal, la aparición de nuevas vías (prolongaciones
de las calles Llull y Taulat con un nuevo puente sobre el Besós), la apertura
de una nueva rambla en La Mina y la propuesta de un paquete dotacional de gran
envergadura aspiraba a configurar una nueva centralidad metropolitana en ese
espacio intermunicipal y fronterizo (entre los ayuntamientos de Barcelona y Sant
Adrià)
Ejemplo de actuación sostenible
El proyecto pretendía ejemplarizar
las posibilidades de una actuación sostenible a pesar de las dificultades de
las condiciones previas. Rechazando la demagogia de una palabra tan utilizada
que casi ya no significa nada, la actuación del Fórum saneó y redelimitó el
frente litoral, descontaminó e inertizó extensas superficies que estaban
contaminadas, recuperó el rio Besós como un cauce fluvial ecológicamente activo,
y propuso la mejora tecnológica de las infraestructuras existentes, con nuevos
procesos, tratamientos y filtros e impulsando la creación de algunas nuevas,
que apoyarían esa filosofía de actuación(nueva central de recogida neumática de
residuos, Eco-Parque de selección y reciclado, etc.)
Uno de los emblemas arquitectónicos del Fórum. El edificio de Congresos de Herzog y De Meuron |
La metodología de actuación urbanística
La metodología urbanística fue bien
diferente a la que se siguió en la
operación olímpica, ejemplarizados en la intervenciónde la Villa Olímpica. Mientras
que para el 1992 los proyectos se adaptaban a unos criterios urbanos previos, posiblemente
restrictivos e impositivos, pero que mostraban una coherencia fruto de un argumento
común, para el 2004 la arquitectura se contempló desde una gran autonomía sobre
el entorno.
Esto llevó a ciertos críticos a
alzar su voz contra los riesgos de una mayor intervención de los promotores
inmobiliarios (cuyos objetivos eran sus propios intereses empresariales) frente
al espíritu público y colectivo que representaría la administración. Además, esa
arquitectura singular fue encargada a arquitectos de alto reconocimiento
mediático lo que llevó a alertar sobre un excesivo protagonismo de los egos del
“star system”( en tantas ocasiones ajenos
a las claves del lugar y solamente preocupados de su propia obra).
De la programación exhaustiva y
pormenorizada de la época olímpica se pasó a un esbozo aproximado de los usos generales,
que serían definidos finalmente por los propios edificios. Esta actuación
fragmentada y abierta, fue defendida por los directores de la operación como la
única posible ante un solar informe plagado de trabas. Por eso, la morfología
general va encadenando espacios y programas con bastante autonomía a modo de collage, confiando en la noción de clúster, tan presente en la ciudad
contemporánea posindustrial. En un territorio como ese no era posible una
lectura convencional, basada en los parámetros habituales. Acebillo lo
presentaba como un “pragmatismo crítico urbano” llegando a hablar de
promiscuidad programática frente a los espacios temáticos.
Los proyectos del Fórum
La dificultad que ofrecía un lugar
con tantos condicionantes era evidente desde el principio. Los primeros Avances
de Ordenación presentados en 1999 manifestaban la dislocación formal y funcional
de la zona, pero en la propuesta definitiva, la fracturación se recompuso bajo
el manto de una plataforma que se convirtió en la metáfora aglutinadora de una
realidad extraordinariamente diversa.
Esta plataforma, generó una nueva
topografía para la zona, arrancando desde la zona del Centro de Congresos y elevándose,
salvando la Ronda Litoral, hasta cubrir buena parte de la depuradora. Sobre
ella se implantaría una gran pérgola fotovoltaica, actuando como hito
referencial del final de la Avenida Diagonal. La explanada se disgregaría finalmente
en unas prolongaciones que con forma de “dedos” se abrirían al mar para, entre
ellos, ubicar rampas y escaleras, resolviendo las conexiones por los “acantilados”
surgidos. Esta plataforma ha sido objeto de múltiples metáforas, desde la de
una ola que rompe al llegar a la orilla (en dirección inversa), hasta un
reflejo de la elevación de Montjuïc en el norte de la ciudad.
Los dos edificios principales, el
Centro de Convenciones y el de Congresos, forman una unidad funcional (incluso
conectada bajo la plataforma) y dan la imagen emblemática del conjunto (especialmente
la del triángulo azul del edificio principal). Las articulaciones entre la
plataforma elevada y la cota del litoral se resuelven con interesantes
propuestas de parques, zonas de baños y el puerto deportivo, con todos sus
equipamientos y zonas comerciales. Es destacable el Parque de la Paz que en el litoral
noreste suaviza e integra las grandes infraestructuras existentes.
(Los números corresponden con los de la
imagen adjunta)
1.
Edificio de Congresos Herzog
y de Meuron
2.
Centro de Convenciones Josep
Lluis Mateo
3.
Plataforma-Explanada Torres
y Martínez Lapeña
4. Pérgola
Fotovoltaica Torres y Martínez Lapeña
5.
Parque de los Auditorios FOA
(Zaera-Moussavi) y Teresa Galí
6.
Zona de Baños Beth
Galí
7.
Puerto Deportivo (marina) Xavier
Casas y Rosa Torres
8.
Puerto Deportivo (zona comercial) BCQ
Arquitectes (Baena, Casamor y Quera)
9.
Parque de la Paz Ábalos
y Herreros
10. Puerto Deportivo (pasarela) Ferré y Domingo / Angel C.
Aparicio
En el futuro se completará la
operación con el programa de la “tercera península” (11) que acogerá al Zoo (Forgas / Lay, Muro, Paéz, Azulay /
Balcells / Ruiz-Geli) y el Pabellón de la Biodiversidad (MVRDV)
Otros proyectos paralelos.
Sin pertenecer propiamente a la operación
del Fórum 2004, pero relacionados con
ésta por su proximidad e influencia en la recualificación general de la zona
aparecen diferentes operaciones.
Una de ellos, muy controvertida y
desarrollada previamente, es la denominada Diagonal Mar.
Diagonal
Mar fue una operación inmobiliaria promovida por la compañía norteamericana
Hines, quien levantó un conjunto residencial, comercial y terciario sobre los
terrenos de la antigua fábrica Macosa (empresa que se dedicaba a
suministros industriales para ferrocarril y construcción, que cerró en 1994).
La propuesta generó desde sus
primeros planteamientos una intensa polémica que afectó a diferentes aspectos
de la misma. En primer lugar hubo críticas a las relaciones establecidas entre
la promotora inmobiliaria Hines y el Ayuntamiento, así como a los acuerdos que
derivaron de ellas, incluso se hizo hincapié en el hecho de que la propuesta
del Fórum fuera altamente beneficiosa para los intereses económicos de la
promotora. También hubo críticas morfológicas, como las derivadas del
planteamiento de su zona residencial, tan alejada de la tradición mediterránea,
ya que su baja densidad se concreta en varias torres-rascacielos de
apartamentos que se agrupan en 5 conjuntos ordenados sin referencia a calles,
ni bajos comerciales, y privatización de la planta baja y su entorno para usos
comunes. Incluso quienes desde posiciones estilísticas, alababan la
singularidad del Parque Central y rechazaban la banalidad del Centro
Comercial.
Ordenación inicial, antes de las modificaciones realizadas por el planteamiento del Fórum. |
En la operación Diagonal Mar, destaca el extraordinario Parque Central (1) que ocupa el centro de la zona residencial y que fue diseñado
por Enric Miralles y Benedetta Tagliabue. (Los números corresponden con los de la imagen adjunta)
Illa de la Llum (2) Lluís Clotet e
Ignacio Paricio
Illa del Bosc (3) Tusquets, Díaz
y Asociados / Muñoz + Albin
Illa del Cel (4) Alonso-Balaguer
Arquitectos Asociados
Illa del Llac (5) BST
Arquitectos / Pep Bonet, Enric Steegmann e Ignasi Tiana
Illa del Mar (6) MSA+A /
Muñoz + Albin
La propuesta residencial se completa
con un mega centro comercial (7) (“Diagonal Mar”, proyectado por Robert Stern).
Varios hoteles (que se suman a la oferta prevista en el programa del Fórum)
Princess Barcelona (8) Tusquets, Díaz y Asociados
Hotel Hilton
(9)
Vinci Marítimo (4) se encuentra formando
parte de la Illa del Cel
Y unas torres de oficinas proyectadas
por los equipos de Tusquets, Díaz y Asociados y Thompson, Ventulett, Stainback
& Associates, Inc.
Torre Diagonal Mar (10)
Torre Apex Inmobiliaria 1 (11)
Torre Apex Inmobilairia 2 (12)
En la ordenación general de la zona
se planteó el equipamiento (13)
(Centro de Convenciones) que acabaría formando parte de la operación del Fórum 2004, transformando el diseño
inicial de toda ese sector.
Vista aérea del parque y las torres residenciales de Diagonal Mar. |
Parque Diagonal Mar |
Otra de las grandes operaciones
propuestas paralelas al Fórum 2004,
que no se encuentra completada es la recualificación
del Barrio de la Mina, que aunque administrativamente pertenezca a Sant Adrià,
sentimentalmente forma parte de Barcelona.
Este barrio surgió en 1969 con el
objetivo de erradicar varios núcleos de infravivienda del área metropolitana
barcelonesa. Siguiendo el “estilo” de aquellas promociones de la época desarrollista, nació con muchas
carencias que acabaron provocando una intensa problemática social. El Barrio de
la Mina acabó convertido en un paradigma de la marginalidad de la ciudad.
La actuación en esta zona ha
sufrido retrasos, parones y algunos de los edificios se encuentran todavía sin
comenzar presentando solares vacíos. En particular, la remodelación de Barrio
de la Mina se encuentra sin ser finalizada. Los planteamientos urbanos para
este barrio actúan en él con bastante radicalidad: eliminando bloques
degradados, proponiendo nuevos equipamientos o trazando una rambla que alojará viviendas
para jóvenes.
(Los números corresponden con los de la
imagen adjunta)
1.
Remodelación de Barrio de la Mina Jorner,
Llop y Pastor
2.
Viviendas de Llull-Taulat varios
autores
3.
Campus universitario Eduard
Bru
4. Centro
geriátrico Lluís Clotet e Ignacio
Paricio
5.
Hotel Plaza Forum Enric
Massip
Excelente aporte! Claro y detallado sobre este magno proceso que llevaron a cabo en Barcelona. Mis saludos y felicitaciones!
ResponderEliminarHola, no se si este comentario llegará a algún sitio después de tanto tiempo.
ResponderEliminarEs para el autor del artículo.
Aportas muchísimos datos, pero me gustaría saber si conoces que empresas constructoras (si tienes un listado de ellas), participaron en todos estos proyectos.
Muchas gracias, un saludo.