Finalizamos
nuestra aproximación a la arquitectura y al urbanismo del Imperio Mogol, como
ejemplo de identidad espacial forjada a
partir de la fusión de culturas contrarias. Durante los siglos XVI y XVII,
en la parte septentrional del subcontinente indio, se construyeron edificios y
ciudades que supondrían una nueva imagen para aquellos territorios que
basculaban en el delicado equilibrio entre lo islámico y lo hinduista.
Lo hemos
hecho en tres partes. En la primera parte
abordamos las cuestiones generales, mientras que en la segunda
visitamos cinco mausoleos, cuatro mezquitas y tres palacios. En esta tercera
parte y última analizaremos dos jardines
(en Srinagar, Cachemira, y en Lahore) y una
ciudad, la espléndida y fugaz capital de los mogoles, Fatehpur Sikri.